Mujeres vinculadas a pinchazos en Monterrey según fiscalía

MONTERREY, NL. — Un fenómeno disruptivo desafía los patrones tradicionales de crimen: la fiscalía confirmó que mujeres están detrás de los recientes ataques con agujas en espacios públicos, replanteando los estereotipos de violencia urbana.

El fiscal Javier Flores reveló que tres incidentes documentados muestran un modus operandi inusual, donde al menos dos agresoras utilizan objetos punzocortantes en escenarios cotidianos. ¿Podría tratarse de una nueva forma de psicología del miedo colectivo?

“Los videos evidencian un patrón recurrente: mujeres aprovechando distracciones en el transporte público y centros de asistencia social”, explicó Flores. Este dato contradice los modelos predictivos de seguridad, obligando a repensar las estrategias de vigilancia.

• El primer caso, ocurrido el 8 de mayo en la Estación Anáhuac, marcó el inicio de esta oleada de microviolencia.

Un segundo episodio, el 19 de mayo, expuso la vulnerabilidad de adultos mayores cuando una mujer fue agredida mientras cobraba su pensión. ¿Estamos ante una distopía urbana donde la confianza social se desvanece?

Las autoridades analizan si los ataques responden a un experimento social, extorsión o trastorno psicológico colectivo. “No descartamos ninguna hipótesis”, advirtió el fiscal, mientras expertos en criminología cuestionan si esto representa una nueva forma de terrorismo cotidiano.

La ausencia de sustancias inyectadas añade misterio: ¿Buscan las agresoras solo sembrar el caos? Monterrey enfrenta así un enigma de seguridad que exige soluciones creativas más allá de las cámaras de vigilancia.