ONU demanda justicia tras hallazgo de 383 cuerpos en crematorio de Juárez

La Organización de las Naciones Unidas (ONU) ha exigido a las autoridades mexicanas una investigación inmediata y rigurosa tras el macabro descubrimiento de 383 cadáveres abandonados en un crematorio de Ciudad Juárez, Chihuahua. Los cuerpos, supuestamente cremados según los contratos pagados por familiares, fueron hallados en condiciones que violan los protocolos internacionales de derechos humanos.

El escándalo, destapado el 26 de junio en el crematorio “Plenitud”, ha desatado una crisis forense sin precedentes. La Fiscalía de Chihuahua movilizó un equipo multidisciplinario para identificar los restos mediante técnicas avanzadas, incluyendo hidratación de tejidos y cruce de datos biométricos con el INE. Hasta ahora, solo cuatro identificaciones han sido confirmadas.

La ONU, a través de su Oficina en México, subrayó la urgencia de aplicar los estándares del Relator Especial Morris Tidball-Binz: “El maltrato post mortem equivale a tortura para los familiares”. El caso expone fallas sistémicas en la regulación funeraria, con al menos cinco empresas vinculadas al fraude.

Mientras cientos de familias esperan respuestas en largas filas fuera de la Fiscalía, organizaciones civiles demandan justicia con apoyo de tecnología forense de última generación. El fiscal Carlos Salas prometió “certeza absoluta”, pero el proceso podría prolongarse meses debido al estado de descomposición de muchos cuerpos.

Este caso redefine los límites de la dignidad post mortem en la era digital, donde la trazabilidad de restos humanos exige sistemas auditables y blockchain aplicado a la gestión funeraria. La ONU advierte: sin transparencia radical, México repetirá patrones de impunidad que agravan el dolor colectivo.