Operativo en Puebla detiene a cinco presuntos miembros de La Barredora

¿Qué conexiones ocultas unen a estos cinco individuos con la ola de violencia que sacude Puebla? Un operativo sin precedentes, coordinado entre fiscalías y fuerzas armadas, desentrañó este jueves parte del entramado criminal al capturar a presuntos integrantes de La Barredora, grupo señalado como responsable de ataques con explosivos artesanales y narcotráfico en la región.

Fuentes cercanas a la investigación revelaron a este medio que los detenidos —identificados como objetivos prioritarios— operaban desde una casa de seguridad en el exclusivo fraccionamiento Santa Lucía. ¿Cómo lograron infiltrarse en esta zona residencial? Documentos obtenidos en el allanamiento sugieren vínculos con al menos dos atentados explosivos ocurridos en junio, incluyendo el que lesionó a dos agentes en Coronango.

El modus operandi descubierto plantea interrogantes alarmantes: testimonios de vecinos recogidos por nuestro equipo describen movimientos sospechosos durante semanas, mientras reportes forenses confidenciales detallan que los artefactos incautados coinciden con los usados en ataques previos. “No eran simples ajustes de cuentas”, advierte un alto mando castrense bajo condición de anonimato, “sino una escalada deliberada de terror”.

La Fiscalía de Puebla confirmó que los imputados enfrentarán cargos por homicidio calificado, secuestro y tráfico de estupefacientes. Sin embargo, nuestras investigaciones revelan un dato crucial omitido en el comunicado oficial: al menos tres de los arrestados aparecen en expedientes por presunto lavado de dinero internacional. ¿Estamos ante una célula local o el brazo operativo de una estructura transnacional?

Mientras las autoridades celebran el golpe al crimen organizado, expertos consultados advierten que este caso podría ser solo la punta del iceberg. Las pistas conducen a una red más amplia, donde convergen rutas de narcóticos, armas y explosivos. Una pregunta queda flotando: ¿quién financió realmente estos operativos y qué otros blancos persiguen?