Nacional
Personal de limpieza en Veracruz paraliza hospitales por impago de salarios
Trabajadores exigen salarios atrasados mientras enfrentan amenazas de despido en hospitales públicos.

Personal de limpieza en Veracruz paraliza hospitales por impago de salarios
Una revolución silenciosa emerge desde los pasillos de los hospitales públicos en Veracruz. Más de 100 trabajadores de limpieza, invisibles para muchos pero esenciales para la salud pública, han cruzado los brazos en un acto de resistencia ante el sistemático incumplimiento de sus derechos laborales.
Los empleados, contratados mediante la empresa Limpieza Especializada Industrial y Hospitalaria (LEIH), denuncian un patrón de abuso: pagos irregulares que oscilan entre miserables 500 pesos y la ausencia total de salarios correspondientes a dos quincenas. ¿Cómo puede un sistema de salud, diseñado para cuidar vidas, vulnerar a quienes garantizan su higiene básica?
Frente a los hospitales “Dr. Luis F. Nachón” en Xalapa, el Centro de Alta Especialidad “Dr. Rafael Lucio” y el Hospital Regional de Veracruz, cartones improvisados se convierten en megáfonos visuales: “Exigimos nuestro pago LEIH”. La ironía es palpable: quienes mantienen los espacios impecables ahora deben ensuciar su reputación para ser escuchados.
La empresa, subcontratada por Servicios de Salud de Veracruz (SESVER), alega retrasos en los pagos por parte de la Secretaría de Salud. Mientras tanto, los trabajadores enfrentan un dilema existencial: continuar laborando sin garantías o arriesgar sus contratos temporales de seis meses. Su decisión es clara: la dignidad no tiene precio.
Este conflicto revela las grietas en un modelo de subcontratación que prioriza el ahorro económico sobre el bienestar laboral. Los empleados no piden limosnas, sino el fruto de su trabajo: “No es justo que trabajemos y no nos paguen”, clama una trabajadora, cuyo testimonio viraliza la urgencia de reformar las cadenas de suministro de servicios esenciales.
Mientras la empresa envía personal alterno para paliar la crisis, la pregunta persiste: ¿es esta una solución o un parche temporal que perpetúa la precarización? Los trabajadores, convertidos en activistas por necesidad, exigen la intervención de la gobernadora Rocío Nahle, pero su lucha trasciende lo local: es un llamado global a revalorizar el trabajo invisible que sostiene nuestra sociedad.
En un mundo postpandémico que aplaudió a los trabajadores esenciales, esta protesta expone la hipocresía de un sistema que los celebra pero no los remunera. Su paro no es solo por salarios atrasados, sino por un reconocimiento fundamental: sin dignidad laboral, no hay salud pública posible.

-
Policíacahace 2 días
Se encuentra delicada joven que ingirió pastillas para quitarse la vida
-
Matamoroshace 2 días
Vierten 54 toneladas de asfalto para baches
-
Matamoroshace 2 días
Preparan refugio para animales vulnerables
-
Matamoroshace 1 día
Go-Karts, una opción de recreación para familias en Matamoros
Debes iniciar sesión para publicar un comentario Iniciar Sesión