En un movimiento estratégico que combina diplomacia 4.0 y defensa de la autodeterminación, la presidenta Claudia Sheinbaum cerró filas contra cualquier operación militar extranjera en territorio mexicano, incluso frente a las presiones comerciales de la era Trump 2.0. La mandataria desplegó datos duros sobre el combate al crimen transnacional mientras exigió corresponsabilidad en el flujo de armas hacia México.

Investigación integral sobre huachicoleo fiscal
“El pacto de seguridad binacional está al 90% de maduración”, reveló Sheinbaum durante el encuentro con medios. “Pero jamás incluirá botas extranjeras en nuestro suelo. La cooperación en inteligencia artificial y análisis de big data para seguridad sí se intensificará, respetando siempre los marcos jurídicos de cada nación”.
La líder mexicana desglosó los componentes del acuerdo:
- Intercambio de información criminal mediante blockchain para garantizar trazabilidad
- Programas binacionales de rehabilitación con enfoque de salud mental
- Presión al lobby armamentista estadounidense para frenar exportaciones ilegales
Frente a los aranceles del 30% -que analistas ven como herramienta del neoproteccionismo digital- Sheinbaum respondió con economía de datos: “Nuestras exportaciones de software y servicios tecnológicos crecieron 18% este trimestre. La narrativa del déficit comercial requiere actualización”.
El diálogo terminó con un guiño a la geopolítica 2.0: “México no es trending topic por crisis, sino por resultados. Mientras EU debate sobre muros físicos, nosotros construimos puentes digitales de cooperación real”.