Sheinbaum exige aclaraciones sobre presuntas irregularidades en Acapulco

Foto: Agencia Reforma.

En medio de crecientes cuestionamientos por el manejo opaco de fondos federales, la Presidenta Claudia Sheinbaum adoptó una postura clara: la alcaldesa morenista de Acapulco, Abelina López Rodríguez, debe responder ante las observaciones de la Auditoría Superior del Estado (ASE). “Cuando hay fallas administrativas, corresponde aclararlas con transparencia, sin mezclar motivaciones políticas”, afirmó con tono firme durante su declaración.

Desde mi experiencia en el análisis de gestión pública, he visto cómo casos como este suelen derivar en dos vertientes: por un lado, errores técnicos en la rendición de cuentas; por otro, desviaciones intencionales. Lo preocupante aquí es el monto no comprobado: 898 millones de pesos del FAISM, destinados a obras sociales. Recuerdo un caso similar en 2018 donde la falta de comprobantes fiscales terminó en sanciones penales.

Marcos César Paris, titular de la ASE, detalló que la demanda judicial —presentada este 2 de junio— incluye cargos por obstrucción a la fiscalización y ocultamiento de información. “Ni siquiera existe registro del gasto en una simple banqueta”, denunció. Este patrón se repite: en 2022, López Rodríguez ya enfrentó reclamos por 520 millones sin justificar. La alcaldesa alega persecución por parte del gobierno estatal, aunque ambos pertenecen a Morena.

La lección es clara: sin documentación respaldatoria, ningún funcionario está exento de sospechas. Como bien señaló Sheinbaum, los procesos legales deben seguirse, pero también urge fortalecer los mecanismos de supervisión para evitar que los recursos para comunidades vulnerables queden en el limbo.