La violencia cancela la conmemoración de la Revolución en Michoacán
La inseguridad obliga a cancelar tradiciones cívicas, revelando una fractura social que trasciende un desfile.
La inseguridad obliga a cancelar tradiciones cívicas, revelando una fractura social que trasciende un desfile.
Una batalla legal deja en el limbo a millones de estadounidenses que dependen de ayuda federal para comer, generando una crisis humanitaria inmediata.
La ciudad despierta paralizada, con calles vacías y una sensación palpable de incertidumbre que afecta a toda la comunidad.
La frustración ciudadana estalla en un acto de violencia colectiva que deja un saldo fatal y reabre el debate sobre la seguridad.
La tensión escaló hasta el límite cuando la multitud, fuera de control, decidió tomar la justicia en sus propias manos.
La respuesta del crimen organizado tras un operativo militar desencadena caos en carreteras y comercios.
El paraíso caribeño se convierte en escenario de caos mientras el gobierno suspende derechos básicos.