La ola de calor que se vive en el norte del estado generó el incremento de un 60 por ciento en las plagas de pulgas y garrapatas, aún en lugares donde no hay presencia de mascotas.
El médico veterinario zootecnista, Víctor Gutiérrez Vielma, titular del centro antirrábico de la III jurisdicción Sanitaria, mencionó que en los últimos día se disparo considerablemente el número de atención a perros y gatos infestados de garrapatas.
El funcionario público estatal hizo alusión a la importancia de que los ciudadanos fumiguen sus patios con un garrapaticida denominado «Ectoline», sustancias que se entrega de forma gratuita en el centro antirrábico y que en el mercado tiene un costo superior a los 600 pesos.
Recalcó que las condiciones climáticas favorecen a la proliferación de las pulgas y garrapatas, mismas que pueden incubar aún después de una fumigación intensa.
Expresó que la garrapata recién nacida es capaz de permanecer durante varios meses sin ingerir alimentos, lo que la hace resistente y difícil de erradicar de una sola zona.
Aludió el peligro que representan las pulgas y garrapatas en el ser humano, pues provocan infecciones y daños irreversibles si no se trata a tiempo la fiebre expuesta.
Exhortó a los ciudadanos dueños de animales a que retomen la cultura de la limpieza y los baños con plaguicidas a los animales infestados con plaga que para ellos son mortales, pues además de causarles problemas en la piel, son portadoras de la bacteria llamada «Rickettsia» que los mata a consecuencia de un flujo nasal abundante.
