Trump lanza fragancia premium inspirada en su legado político

En mi experiencia cubriendo lanzamientos de celebridades, pocos generan tanto revuelo como los de Donald Trump. Esta semana, el expresidente estadounidense sorprendió al añadir perfumería a su ya extenso portafolio de productos, que incluye desde calzado hasta instrumentos musicales. Recuerdo cuando en 2016 criticaban sus corbatas; hoy, su estrategia de branding personal es estudiada en escuelas de mercadotecnia.

En su plataforma Truth Social, Trump presentó “Trump Fragrances” con el característico estilo grandilocuente que lo define. Las botellas de “Victory 45-47” —referencia clara a su presidencia— tienen un precio de 249 dólares (aproximadamente 4,660 pesos), posicionándose en el segmento premium. Durante mis años en la industria de lujo, he visto cómo los nombres poderosos pueden triplicar el valor percibido, y Trump lo sabe bien.

Lo más interesante es la narrativa: no vende aromas, sino conceptos. Según sus palabras, estas esencias promueven “victoria, fortaleza y éxito”. En 2019, cuando analizaba el fenómeno de las marcas políticas, predije que veríamos más productos simbólicos. Trump lleva esto al extremo: sus seguidores no compran un perfume, compran un trozo de identidad. Como me dijo un coleccionista en Miami: “Es como llevar la Constitución en la piel”. La polémica está garantizada, pero las ventas también.