Foto: Agencia Reforma.
El Mazatlán FC enfrenta un punto de inflexión tras la sorpresiva salida de Víctor Manuel Vucetich, quien decidió alejarse del banquillo por razones personales. ¿Estamos ante el fin de una era o el inicio de una reinvención audaz para el club?
El comunicado oficial, breve pero contundente, no revela detalles profundos, pero abre un abanico de interrogantes: ¿Fue el rendimiento deportivo —un discreto 16° lugar en el Clausura 2025— un factor invisible tras esta decisión? O, en un giro lateral, ¿podría esta partida esconder una oportunidad para innovar en un equipo que lucha por consolidarse?
Vucetich, un estratega con décadas de experiencia, deja un legado mixto: solo 4 victorias en 17 encuentros, pero también semillas de un estilo que quizá no tuvo tiempo de florecer. En un deporte donde lo convencional dicta contrataciones efímeras, su salida invita a reflexionar: ¿y si los clubes apostaran por ciclos largos, como hacen los equipos más disruptivos del mundo?
Mientras el Mazatlán FC busca un sucesor, el mercado especula. Pero más allá del nombre, el verdadero desafío es romper paradigmas: imaginar un modelo donde los “motivos personales” no sean un epílogo, sino un capítulo más en una estrategia holística que priorice a las personas tanto como los resultados.
¿Está el fútbol mexicano listo para transformar las crisis en reinvenciones? La respuesta podría definir el futuro no solo de este club, sino de toda una liga.