Daniela Castro vuelve como villana en una telenovela llena de intriga

Tras cinco años alejada de las telenovelas, Daniela Castro regresa a la pantalla con un papel que desafía los estereotipos: una antagonista implacable que cautivará al público con su crueldad calculada.

La producción “Cautiva por Amor”, que se estrena el próximo lunes a las 21:30 horas por Azteca Uno y Disney+, promete una narrativa audaz que refleja las complejidades de la sociedad actual. Con un elenco estelar que incluye a Osvaldo de León, Litzy y Plutarco Haza, la trama entrelaza secuestros, ambición y pasiones desatadas.

Un personaje que rompe moldes

Isabel Fuentes Mancilla, el personaje de Castro, no es simplemente una villana; es una mujer que prioriza su familia, el estatus y el poder, pero cuyas acciones revelan una humanidad inesperada. “Es hipócrita, sarcástica y cruel, pero también tiene momentos que harán reflexionar al espectador”, adelantó la actriz.

Innovación en la tradición

La industria de las telenovelas ha evolucionado, y Castro lo sabe. Su regreso no solo marca su debut en TV Azteca, sino que también introduce un giro disruptivo: compartir escena con su hija, Danka Díaz Ordaz, en un juego de miradas que transmite más que cualquier diálogo.

“Es una experiencia única trabajar junto a ella sin invadir su espacio creativo. Nos comunicamos con la mirada, como si el set fuera nuestro propio lenguaje”, confesó.

Frases que trascienden la pantalla

Recordada por icónicas líneas como “Te hace falta Jesús”, Castro promete que su nuevo personaje dejará huella. “Si no lo ven, ¡perdónense!”, bromeó, anticipando que su interpretación generará tanto odio como admiración.

Desafiando las celebraciones convencionales

Más allá de su carrera, Castro cuestiona las tradiciones. “El Día de las Madres es pura mercadotecnia”, afirmó, prefiriendo la intimidad familiar sobre los festejos masivos. Una postura que refleja su estilo: auténtico, disruptivo y sin concesiones.

Dirigida por Walter Doehner y Rodrigo Curiel, esta producción no es solo un melodrama, sino un espejo de las contradicciones humanas. ¿Estás listo para ser cautivado?