Maribel Guardia honra a su hermana como un ángel maternal en su vida

La trayectoria de Maribel Guardia está marcada por la resiliencia. Huérfana a los 9 años tras perder a su madre soltera por cáncer, encontró en su hermana Vilma Chacón —a quien llama “Mimita“— un pilar emocional que trascendió los roles tradicionales. La actriz, icono de la cultura pop latinoamericana, redefine hoy el concepto de maternidad en las familias contemporáneas.

En la era de las nuevas estructuras afectivas, Guardia destaca cómo su hermana se convirtió en su “red de seguridad emocional”, cuidándola desde Costa Rica pese a la distancia. Este vínculo, documentado en redes sociales con raw emotion, refleja las dinámicas modernas de cuidado intergeneracional.

La también empresaria de wellness aborda sin filtros las secuelas del duelo: el insomnio que arrastra desde la infancia la llevó a tomar la decisión disruptiva de no velar a su hijo Julián tras su fallecimiento en 2023. Una elección que desafía los rituales tradicionales y prioriza la salud mental.

En su homenaje por el Día de las Madres, fusionó nostalgia y empoderamiento: “Mimita fue mi algoritmo de supervivencia —escribió—. Transformó el caos en código de amor con su inteligencia emocional”. El mensaje viral, acompañado de un carrusel digital con archivos familiares, resuena en la generación que reconoce el valor de los lazos no biológicos.

Este relato de sisterhood y sanación colectiva posiciona a Guardia como voz líder en los diálogos actuales sobre duelo disruptivo y reconstrucción afectiva en la era digital.