Argentina: Denunció el secuestro de su esposa… que él mismo cometió

La violencia contra las mujeres no tienen fronteras, existe en cualquier lugar del mundo, dejando millones de víctimas. Como ocurrió en el partido bonaerense de Moreno, Argentina, cuando un hombre fue a denunciar la policía el secuestro de su esposa, diciendo que los captores le exigían una fuerte suma de dinero para liberarla, pero conforme avanzaba la narración a los agentes les surgieron dudas, por lo que comenzaron a cuestionarlo, en ese momento el sujeto se derrumbó y terminó confesando que él la mató y descuartizó.

Nilda Rosa González Ojeda, una joven de de 29 años y madre de cinco hijos, es el nombre de la víctima, la cual fue asesinada por el hombre que decía amarla, con el que formó una familia y con el que compartía el techo, Juan Darío Sanabria Báez, de 36 años y de oficio albañil. Ante la policía el sujeto dijo que si no pagaba el dinero del rescate los secuestradores le sacarían los órganos a su esposa y los venderían.

Como parte del interrogatorio, los policías confiscaron el teléfono celular del sujeto y comenzaron a revisarlo, así descubrieron que tuvieron una pelea por una presunta infidelidad y lo cuestionaron por el hecho. Al sentirse presionado, Juan Darío confesó el feminicidio de su esposa, dijo que una noche antes de acudir a denunciar el supuesto secuestro, discutió con ella y la apuñaló, tras darle muerte descuartizó su cuerpo, metió los miembros en una mochila y los tiró en un descampado a pocos kilómetros de su casa.

Según las investigaciones, los brazos y piernas fueron arrojados a un pozo ciego ubicado en el domicilio: mientras que la cabeza y torso (que llevaba en la mochila) fueron encontrados en un campo abierto, en el límite entre los partidos de Moreno y José C. Paz. Para deshacerse de ellos, viajó en el transporte público llevándolos a cuestas.

En el operativo de localización de los restos, participaron bomberos voluntarios y especialistas de la Policía Científica trabajaron. Mientras que en las labores de la casa de la víctima para la contención de los menores y la familia, colaboraron miembros de la policía y funcionarios de las secretarías municipales de la Mujer y de Seguridad.

Aunque Sanabria Báez confesó el femicidio ante la policía, esa declaración no tiene validez judicial y se espera que sea indagado este domingo por la fiscal Luisa Pontecorvo, que tituló la causa como: “Homicidio agravado por violencia de género y por ser cometido por un hombre contra una mujer. Femicidio”.

Según se indicó, la pareja llegó hace más de 10 años de Paraguay, en Argentina vivían en un predio que compartían con los padres y un hermano de Sanabria Báez. Durante su unión procrearon cinco hijos: tres niños de 14, 11 y 9 años y dos niñas de cuatro y dos años. Por el momento, no se ha informado dónde estaban los menores al momento del femicidio, ni qué pasará con su guardia y custodia.

Fuente: El Heraldo de México