Ofensiva sobre infraestructura crítica en pleno diálogo
En un giro que tensiona el frágil escenario diplomático, un bombardeo masivo de Rusia impactó este martes en Kiev, cobrándose siete vidas y dejando una veintena de heridos. La arremetida se produce en paralelo a las conversaciones en Abu Dabi sobre el plan de paz del exmandatario Donald Trump, evidenciando una estrategia de guerra híbrida que combina diplomacia y fuerza bruta.
Asalto tecnológico a redes esenciales
El operativo empleó un enjambre de más de 460 drones Shahed y una veintena de misiles balísticos y de crucero, focalizándose en la infraestructura energética y de suministro hídrico. Esta táctica de desgaste, diseñada para minar la resiliencia urbana, sumerge a la ciudadanía en apagones prolongados que superan las 12 horas diarias, colapsando servicios básicos como la calefacción y el agua corriente.
Postura ucraniana: soberanía digital y alianzas colectivas
Frente a la escalada, el presidente Volodímir Zelenski exigió un marco de negociación multilateral, rechazando el formato bilateral. Su estrategia apela a una cooperación internacional cibersolidaria para ejercer presión sobre el Kremlin y perfeccionar el borrador inicial de 28 puntos, adaptándolo a las realidades de la guerra asimétrica y la defensa de infraestructuras críticas en la era digital.


















