Elon Musk tilda de abominación la reforma fiscal de Trump

WASHINGTON — Elon Musk, el magnate detrás de Tesla y SpaceX, arremetió contra la reforma fiscal impulsada por Donald Trump, calificándola de “repugnante abominación” en un explosivo mensaje publicado en su plataforma X. La crítica, lanzada apenas días después de su salida del Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE), marca un giro radical en su relación con el expresidente y el Partido Republicano.

“Lo siento, pero no puedo soportarlo más”, escribió Musk. “Este proyecto de ley, repleto de gastos innecesarios, es una vergüenza. Quienes lo apoyaron deberían ruborizarse”. La iniciativa, ya aprobada en la Cámara de Representantes, reduciría subsidios clave para vehículos eléctricos, afectando directamente a Tesla.

El empresario no se limitó a la crítica: amenazó con movilizar su influencia en las próximas elecciones. “En noviembre, despediremos a los políticos que traicionaron al pueblo”, advirtió. Una postura sorprendente para quien invirtió 250 millones en la campaña de Trump en 2024.

Analistas políticos señalan que el conflicto refleja una fractura en el GOP, dividido entre la lealtad a Trump y el peso financiero de Musk. “Complica la estrategia republicana”, admitió Alex Conant, consultor del partido. Sin embargo, senadores como Shelley Moore Capito descartaron que el CEO pueda superar el influjo de Trump en la base conservadora.

El proyecto de ley busca extender los recortes fiscales de 2017 y añadir nuevos beneficios, financiados con recortes a programas sociales y energías limpias. Para Musk, esto representa un doble golpe: perjudica sus negocios y contradice su visión de sostenibilidad tecnológica.

La reacción no se hizo esperar. Senadores como Rand Paul y Mike Lee respaldaron parcialmente a Musk, criticando el “gasto descontrolado”. Mientras, los demócratas aprovecharon la grieta. “Rara vez coincidimos, pero hoy Musk tiene razón”, declaró el líder minoritario Hakeem Jeffries.

La Casa Blanca restó importancia al conflicto. “Trump conocía su postura”, afirmó la portavoz Karoline Leavitt. Pero el episodio evidencia cómo la política fiscal se ha convertido en un campo de batalla donde convergen intereses corporativos, ideología y el futuro de la economía digital.

Este enfrentamiento podría redefinir las alianzas en Washington, especialmente si Musk decide canalizar su influencia tecnológica y mediática hacia una oposición activa. En una era donde el activismo CEO moldea políticas públicas, su próximo movimiento será clave.