Esta semana una niña estuvo a punto de ser raptada en la colonia Ferrocarrilera, por fortuna logró escapar y el hecho fue denunciado y está siendo investigado por las autoridades.
Los focos rojos permanentemente están encendidos sobre los delitos que se cometen en contra los más vulnerables de la sociedad: niñas y niños.
Según el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, tan sólo en lo que va de este año, en Nuevo León se han registrado 98 casos de corrupción de menores y un caso de tráfico de menores.
Aunque el registro que se publica sobre el delito de trata de personas no es específicamente de niñas y niños, se han denunciado 13 casos en lo que va de este año, mientras que el año pasado fueron 18.
De enero a junio hay mil 20 denuncias por delitos contra la libertad personal, 48 raptos y 969 casos de lo que se denomina “otros delitos que atentan contra la libertad personal”.
Las cifras oficiales también muestran que la violencia familiar en general, es constante.
Las estadísticas exponen que la cantidad de delitos contra la familia y la sociedad es similar al año pasado, es decir, no se muestra mejoría en el comportamiento de las cifras.
Los delitos contra la libertad y la seguridad sexual fueron mil 434 hasta el pasado mes de junio. 567 abusos sexuales, 108 casos de acoso sexual, 23 hostigamientos sexuales.
El registro nacional indica que en los primeros meses de este año se presentaron 364 casos de violación simple y 166 de violación equiparada, datos que no vienen desagregados por edad o sexo.
Se han cometido 10 mil 340 delitos contra la familia en la entidad, que incluyen 7 mil 624 casos de violencia familiar y 252 casos de incumplimiento de obligaciones de asistencia familiar.
Según la Fiscalía General de Justicia de Nuevo León (PGJNL), que no define edades o sexo, en 2017 se cometieron mil 7 casos de atentados al pudor, en 2018 fueron mil 112 y hasta junio de este año existe un registro de 567.
En el delito de corrupción de menores hubo un registro de 162 casos en 2017 y 160 en 2018, mientras que en 2019 van 98 denuncias.
Sin especificar en qué condiciones se dieron, si fueron localizados, y si fue así, en cuánto tiempo, el delito de sustracción de menores en las cifras que muestra la PGJNL indican que es más frecuente de lo que la sociedad percibe.
Por poner algunos ejemplos, en Montemorelos se han reportado ocho sustracciones hasta junio de este año, mientras que en 2018 se reportaron 19.
En Cadereyta las cifras oficiales indican que en 2019 van 18 robos de menores y en 2018 fueron 51, mientras que en Juárez la cifra es mucho mayor, con 63 hasta el pasado junio y 134 el año pasado.
En García van 79 este año y en 2019 se denunciaron 159, a la vez que en Monterrey hubo 176 denuncias por dicho delito durante el presente año y 379 el pasado.
La menor que el martes pasado estuvo a punto de ser víctima de un delito mayor por un hombre mayor que a base de engaños logró hacerle tocamientos en su cuerpo, pero no pudo subirla a su automóvil, pues ella logró escapar.
Para prevenir que los menores sean víctimas de delitos, el Estado de Nuevo León ha publicado recomendaciones para los padres de familia eduquen a los menores. Algunas de ellas:
– Que en caso de que necesiten ayuda, la soliciten a un policía, personal de seguridad, o personal de alguna tienda o negocio cercano.
– Que no se vayan con cualquier persona, a menos de que sea alguna autoridad.
– Que si no saben dónde estás o te pierden de vista, no se alejen del sitio donde se encuentran, ni aborden ningún tipo de transporte.
– Que en la calle no hablen con personas que no conocen, ni proporcionen información personal a desconocidos.
– Que si una persona intenta llevarlos a la fuerza, o subirles a algún vehículo, deben pedir ayuda y digan que no conocen a esa persona.
– Que nunca acepten irse con nadie, si se lo piden hacerlo a escondidas.
– Que al salir tu casa avisen e indiquen a donde se dirigen.
– A no hablar con extraños, y en caso de no tener a la vista a los padres que se acerquen a una autoridad con uniforme.
– Mantenerse al pendiente de actitudes fuera de lo común que presenten tus hijos para poder prevenir conductas de riesgo.
– Alerta a los menores sobre cualquier desconocido que les solicite ayuda o información. Si un adulto necesita ayuda debe pedírsela a otro adulto.
– Advierte a tus hijos sobre las consecuencias de hablar con personas extrañas por internet y redes sociales.
– A desconfiar de anuncios o personas que ofrecen trabajos muy atractivos, principalmente si el trabajo es fuera de la ciudad donde viven, más aún si piden que se tomen fotografías en traje de baño o con poca ropa.
AGENCIAS
