Papa León XIV enfrenta el desafío de los abusos en la Iglesia

CIUDAD DEL VATICANO

En un gesto que busca marcar un nuevo rumbo, el papa León XIV sostuvo este jueves su primer encuentro con la Comisión Pontificia para la Protección de Menores, un organismo clave en la lucha contra los abusos sexuales dentro de la Iglesia católica. La reunión llega en un momento crítico, con crecientes exigencias de transparencia y justicia para las víctimas.

El diálogo, descrito como un “punto de inflexión” por los miembros de la comisión —integrada por expertos en derechos humanos, supervivientes y líderes religiosos—, abordó estrategias para erradicar la violencia clerical y fortalecer protocolos de prevención global, especialmente en comunidades vulnerables.

Pese al simbolismo del acto, el Vaticano mantuvo en reserva las declaraciones del pontífice, alimentando el escepticismo de quienes esperan acciones concretas. La sombra de casos pendientes, como el del exjesuita Marko Rupnik —acusado por 24 mujeres—, sigue ensombreciendo los esfuerzos de renovación.

La comisión, creada por Francisco en 2014, perdió peso tras el bloqueo de su propuesta estrella: un tribunal para enjuiciar a obispos encubridores. Hoy, bajo el liderazgo del cardenal O’Malley, funciona como espacio de asesoría, aunque activistas exigen medidas más contundentes, como la expulsión definitiva de clérigos acusados.

León XIV, el primer papa estadounidense, arrastra tanto reconocimiento por su labor contra redes de abuso en Perú como cuestionamientos por su manejo de casos durante su etapa en la Orden Agustina. Mientras las víctimas aguardan soluciones, la Iglesia navega entre la urgencia de reparación histórica y las resistencias de su estructura jerárquica.