Piden a universidades identificar a estudiantes indocumentados para cambiar su matrícula

McALLEN, Texas.– El estado de Texas está ordenando a las universidades públicas que identifiquen a los estudiantes que viven en el país sin documentos legales, con el objetivo de cambiarles la tarifa de matrícula a la que corresponde a los estudiantes foráneos. Esta decisión surge tras un fallo judicial que anuló la llamada “Ley Dream de Texas”.

En una carta enviada la semana pasada a los presidentes de universidades, el comisionado Wynn Rosser informó que los estudiantes indocumentados que han estado pagando matrícula estatal deberán ver ajustes a partir del semestre de otoño. Sin embargo, las autoridades no han dado detalles sobre cómo las universidades deben identificar a estos alumnos.

“La verdadera falta de claridad legal simplemente obliga a las instituciones nuevamente a idear su propio proceso”, señaló Kasey Corpus, de la organización Young Invincibles, que defiende los derechos de jóvenes adultos en Texas.

La Ley Dream, vigente desde 2001, permitía que jóvenes indocumentados que vivieran al menos tres años en el estado y se graduaran de una preparatoria texana accedieran a tarifas reducidas. También debían firmar una declaración jurada comprometiéndose a buscar la residencia legal. Sin embargo, un juez federal bloqueó esta ley a petición del propio estado, que argumentó su inconstitucionalidad.

Ahora, las universidades enfrentan un reto complicado, pues los estudiantes no están obligados a comprobar su ciudadanía al solicitar admisión ni a proporcionar número de Seguro Social. Melanie Gottlieb, directora de la Asociación Americana de Registradores, explicó: “No existe una manera sencilla para que una institución sepa si una persona es indocumentada. Es una pregunta compleja”.

El Texas Tribune preguntó a varias universidades si tienen registros sobre el estatus migratorio de sus estudiantes. El Sistema Universitario de Houston respondió que no se solicita ese tipo de información. Otras instituciones, como Texas A&M en el Sur de Texas, UT Dallas y UT en el Valle del Río Grande, no respondieron o señalaron que siguen analizando el impacto del fallo.