Trump eleva aranceles a India al 50% por compra de petróleo ruso

En un movimiento que redefine las dinámicas geoeconómicas, Donald Trump activó un arancel del 25% sobre India por su adquisición de crudo ruso, sumando un gravamen total del 50%. La medida, firmada este miércoles, refleja la estrategia agresiva de Washington para presionar aliados en medio de la guerra en Ucrania.

Las tarifas, que entrarán en vigor en tres semanas, podrían desestabilizar la economía india, considerada hasta ahora un hub manufacturero alternativo a China. Curiosamente, Beijing —principal comprador de energía rusa— quedó exento de la orden, generando críticas por trato preferencial.

Analistas advierten que el impacto será inmediato: exportaciones indias a EE.UU. podrían caer hasta un 50%, afectando sectores clave como farmacéuticos y textiles. “Es un golpe a la seguridad energética de 1.400 millones de personas”, declaró Nueva Delhi, mientras exploraba contramedidas legales en la OMC.

La decisión contradice abiertamente el tope de precios al petróleo ruso impulsado por el G7 en 2022, que buscaba limitar los ingresos de Moscú. India, sin embargo, aprovechó el mecanismo para asegurar suministros asequibles, utilizando la flota fantasma de buques no occidentales.

Con posibles reuniones entre Trump y Putin en agenda, el escenario geopolítico se complica. Mientras tanto, empresas tecnológicas como Apple —cuya cadena de suministro depende de India— monitorean el conflicto, temiendo disrupciones en sus operaciones globales.

Este episodio marca un giro en la desglobalización, donde las alianzas comerciales se reconfiguran bajo lógicas de seguridad nacional y competencia estratégica. ¿Será India el próximo campo de batalla en la guerra fría tecnocomercial entre superpotencias?