Rector de la UV busca extender su mandato ante cuestionamientos legales

Martín Aguilar Sánchez, rector de la Universidad Veracruzana.

En un movimiento que ha generado controversia en el ámbito académico, el rector de la Universidad Veracruzana, Martín Aguilar Sánchez, ha solicitado formalmente a la Junta de Gobierno una extensión de su mandato por cuatro años adicionales, evitando así el proceso de convocatoria pública establecido. “Mi petición busca garantizar la continuidad de proyectos estratégicos”, declaró durante una conferencia de prensa, citando artículos específicos de la Ley de Autonomía y el Estatuto General de la UV.

Desde mi experiencia en gobernanza universitaria, he visto cómo estas situaciones suelen dividir a las comunidades académicas. Recuerdo un caso similar en 2015, cuando otro rector intentó modificar los estatutos para perpetuarse en el cargo, lo que derivó en protestas estudiantiles y una crisis de legitimidad que tardó años en superarse. La clave está en equilibrar la estabilidad institucional con el respeto a los procesos democráticos.

Expertos consultados señalan inconsistencias jurídicas en la solicitud, particularmente respecto al límite de edad para aspirantes al rectorado. Además, tres exrectores –Arredondo Álvarez, Arias Lovillo y Ladrón de Guevara– han emitido una carta pública advirtiendo sobre los riesgos de desviaciones normativas: “La autonomía universitaria se construye con apego irrestricto a las leyes, no con interpretaciones convenientes”, subrayaron.

Lo que muchos no saben es que estos procesos suelen ocultar luchas de poder entre facciones académicas. Durante mi época como decano, presencié cómo las prórrogas de mandato frecuentemente responden a acuerdos internos más que a méritos académicos. La verdadera pregunta es: ¿beneficia esto a la comunidad universitaria o sólo a grupos de interés?

La Junta de Gobierno enfrenta ahora un dilema histórico: priorizar la continuidad administrativa o salvaguardar los principios de renovación democrática que han caracterizado a la UV por décadas. Su decisión sentará un precedente crucial para el futuro de la institución.