La desaparición de Lilia Robles Mendoza, una mujer de 50 años, ha movilizado a su familia y a organizaciones civiles en Reynosa, Tamaulipas, en un caso que subraya la crítica situación de seguridad en la región. Fue vista por última vez la mañana del 19 de octubre de 2025 en la colonia Balcones de Alcalá, Sección 1. En el momento de su desaparición, conducía un vehículo Nissan Versa color rojo cereza, modelo 2020, con placas de circulación WYP624D, un dato considerado crucial para las investigaciones.
La Comisión Estatal de Búsqueda de Personas de Tamaulipas y la Fiscalía General de Justicia del Estado han emitido una ficha oficial con sus señas particulares. Lilia Robles tiene una estatura de 1.65 metros, pesa 76 kilogramos, es de tez morena clara y complexión robusta. Sus ojos son café oscuro y su cabello castaño. Entre sus características distintivas se encuentra una pequeña cicatriz localizada entre las cejas, otra en el vientre de aproximadamente 15 centímetros en línea vertical, resultado de una cesárea, y una tercera en el abdomen superior del lado derecho que mide alrededor de 17 centímetros.
Según el testimonio de su madre, la última comunicación que sostuvo con Lilia fue una llamada telefónica alrededor de las 8:00 de esa mañana. Ambas habían quedado en verse para ir a almorzar, pero Lilia nunca llegó al punto de encuentro y posteriormente dejó de responder cualquier intento de contacto. La familia ha destacado que Lilia es madre soltera y propietaria de una empresa inmobiliaria, un perfil que hace más inquietante su desaparición repentina.
La urgencia por encontrar a Lilia llevó al Colectivo Amor por los Desaparecidos en Tamaulipas y a sus seres queridos a organizar una caravana de protesta y exigencia de justicia durante la tarde del lunes. La movilización ciudadana recorrió las calles de Reynosa con consignas claras y visibles. En los vidrios de los automóviles participantes se podían leer mensajes como “Queremos a Lili de regreso”, “Hoy por Lili Robles” y “Queremos paz y seguridad, queremos a Lili”. Esta acción busca presionar a las autoridades competentes en el área de personas no localizadas para que prioricen la investigación y desplieguen todos los recursos disponibles.
El caso de Lilia Robles se enmarca en un preocupante repunte de desapariciones registradas en Reynosa en los últimos días, una situación que ha generado alarma en la comunidad y ha saturación los mecanismos de búsqueda oficiales. Los colectivos de familiares han señalado repetidamente la necesidad de una respuesta inmediata y eficaz por parte de las instituciones, subrayando que cada minuto es decisivo en la localización con vida de una persona.
Los familiares han hecho un enérgico llamamiento a la solidaridad ciudadana, solicitando a cualquier persona que pueda tener información, por mínima que parezca, que se ponga en contacto de inmediato. Han dispuesto varias líneas de comunicación, incluyendo los números telefónicos 834 318 6150 y 834 688 5075, así como la línea de WhatsApp 834 273 0292. También se puede reportar cualquier dato relevante al número de emergencias 911. La colaboración comunitaria se presenta como un elemento fundamental para generar pistas que permitan dar con el paradero de Lilia y devolverla a su hogar.