Canelo Álvarez reclama su trono en una pelea que decepcionó a los fans

Foto: El Universal.

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Saúl “Canelo” Álvarez reconquistó su estatus como monarca indiscutible del peso supermediano en una batalla ante William Scull que dejó más dudas que aplausos. El combate, celebrado en la futurista ANB Arena de Riad, culminó con una victoria por decisión unánime (115-113, 119-109, 116-112), pero sin el impacto esperado en la era de los eventos globales de alto octanaje.

El cuadrilátero se convirtió en escenario de una coreografía defensiva, lejos de los espectáculos virales que dominan las plataformas digitales. Scull, el retador cubano, admitió su nerviosismo y hasta pidió disculpas al finalizar: “Discúlpame, campeón”, confesó según reveló el propio Canelo en entrevista con TV Azteca.

Las críticas en Twitter y TikTok no se hicieron esperar. La generación Z, acostumbrada a los highlights deportivos en formato reel, calificó el encuentro como “anticlimático”. Incluso el campeón tapatío mostró su frustración: “Para que haya un show auténtico, ambos deben arriesgar”, declaró, en clara referencia al estilo evasivo de su oponente.

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Este triunfo consolida a Álvarez como el único pugilista activo con los cuatro cinturones mundiales (AMB, CMB, OMB, FIB) en la era de los influencer boxers. Sin embargo, el debate sobre el futuro del boxeo tradicional frente al auge de las peleas exhibición sigue abierto. Mientras tanto, Canelo cerró con un mensaje para sus haters: “Seguimos reinando”.