Las niñas y los niños son los migrantes más vulnerables. Cuando son ellas y ellos los que llegan ilegalmente a Estados Unidos son conocidos como Dreamers (soñadores) y hasta ahora estaban protegidos por DACA. Pero Trump ya no quiere que esto sea así por lo que canceló el programa.
¿Qué es DACA?
DACA significa Acción Diferida para los llegados en la Infancia y es un programa del Departamento de Seguridad Nacional de EE. UU. creado en 2012 bajo el gobierno de Barack Obama. El programa ha beneficiado a cerca de 750 mil menores de edad.
DACA les otorgaba un permiso de trabajo temporal, un número de seguro social, identificación del estado, licencia de conducir del estado y seguro médico a los migrantes que llegaron en la infancia a Estados Unidos.
A pesar de que cifras del Instituto de Política Migratoria de los Estados Unidos aseguran que hay 1.9 millones de jóvenes y niños indocumentados que podrían solicitar DACA, hasta ahora sólo se han aprobado cerca de 788 mil solicitudes ya que la mayoría de ellos tienen miedo de que haya cambios que permita que el Gobierno los deporte (lo que sería más fácil pues el gobierno tendría sus datos).
Ahora que terminará DACA, ¿qué pasará?
Ahora que Trump terminó con DACA, los menores que acaban de renovar su permiso tendrían una estadía de dos años máximo. Después de eso terminaría su estancia legal en Estados Unidos.
Naturalmente, estos menores de edad están temerosos sobre el futuro en tiempos de Trump. Muchos de estos niños y jóvenes no conocen el idioma del país de sus padres (pues la mayor parte de su vida la han vivido en Estados Unidos) y no conocen otro hogar y otro mundo que no sea el lugar que siempre han habitado.
8 de cada 10 beneficiarios de DACA son de origen mexicano.
¿Por qué perderá Estados Unidos si Trump quita DACA?
Hasta ahora hay varios sectores que han apoyado a los Dreamers, como Silicon Valley, el motor tecnológico de Estados Unidos.
Tanto Mark Zuckerberg (el fundador de Facebook) y Tim Cook (director ejecutivo de Apple) han expresado su apoyo.
Silicon Valley históricamente ha defendido a los migrantes ya que muchos de sus colaboradores son personas que vienen de otros países.
Incluso, una carta firmada por los jefes ejecutivos de Apple, Amazon, Facebook y Google (entre otros 300 líderes de negocios) pidió a Trump que siga protegiendo a las chicas y chicos de DACA. En la carta dice:
“Los Dreamers son vitales para el futuro de nuestras compañías y para nuestra economía. Con ellos, crecemos y creamos trabajos”
“Ellos son parte del por qué continuamos teniendo una ventaja competitiva a nivel global”
El motor tecnológico de Estados Unidos está preocupado por las decisiones del presidente Donald Trump y no es por nada: si los Dreamers son prohibidos y perseguidos, los únicos que sufrirán las consecuencias son los estadounidenses.
Lo que dice Zuckerberg no es ningún invento, los Dreamers realmente se esfuerzan por cumplir las reglas y sobresalir académica y laboralmente. Así que Estados Unidos estaría rechazando una fuerza juvenil que se esmera por destacar y contribuir a su comunidad.
Según está imagen cuya data fue obtenida por Tom K. Wong, profesor de ciencia política de la Universidad de California en San Diego, el Centro Nacional de Derecho Migratorio y el Centro del Progreso Americano, el 95 % de los Dreamers beneficiados con DACA están en la escuela o trabajando; el 63 % tienen trabajo mejor remunerado; el 54% compraron su primer coche; 48% consiguió un trabajo con mejores condiciones laborales y un 12 %compró su primera casa.
Los Dreamers son luchadores, aunque no siempre resultan victoriosos. La gran mayoría de ellos tienen todo en su contra para sobresalir, y aún así lo siguen intentando. Según VOX, de las personas que se registraron en DACA, el 5 % (57 mil) consiguieron títulos de licenciatura y otro 20 % de ellas están matriculados en la universidad.
Esto es sorprendente sobre todo porque la mayoría vienen de familias pobresy viven en hogares de bajos ingresos (además, su estatus ilegal les impide conseguir ayuda financiera federal, como becas o préstamos estudiantiles).
Roberto Gonzales, sociólogo de Harvard, también apunta un fenómeno llamado la “transición a la ilegalidad” que es cuando los jóvenes descubren que son ilegales (muchos no lo saben hasta cumplir 15 o 16 años que es cuando requieren hacer los trámites que hacen sus amigos y compañeros de clase).
Una vez que descubren que no son “legales”, estos jóvenes deben ajustar sus expectativas de vida. Muchos se desmotivan y dejan de sobresalir en la escuela o dejan de perseguir carreras de alto nivel porque no pueden imaginarcómo es que un inmigrante ilegal pueda tener éxito en la vida.
Además, derogar DACA tendrá consecuencias negativas para las escuelas, hospitales, empresas de tecnología, tribunales y organizaciones comunitarias para las que trabajan los Dreamers. Porque, en la actualidad, hay cientos de maestros que lograron ser profesores gracias a la ayuda de DACA.
Tan sólo, después de la destrucción del Huracán Katrina, cientos de inmigrantes ilegales ayudaron con la restauración de Estados Unidos (muchos de los trabajos para reconstruir las ciudades no son trabajos que quieran los ciudadanos regulares).
Inmigrantes adultos y Dreamers son inversionistas, pues arriesgan todo lo que tienen para encontrar un futuro mejor, muchas veces eso ha terminado con el engrandecimiento de los países, la pregunta es: ¿está dispuesto Estados Unidos a sacrificar uno de sus secretos para convertirse en un líder mundial? Con Trump a la cabeza, parece que sí…
Con información de: TELEVISA
