El telescopio Webb desvela el misterio de las auroras extremas de Júpiter

Una imagen reveladora proporcionada por la NASA expone con precisión sin precedentes las auroras polares de Júpiter, capturadas por el telescopio espacial James Webb. Estos destellos cósmicos, cientos de veces más luminosos que sus equivalentes terrestres, plantean interrogantes sobre los mecanismos energéticos del gigante gaseoso.

¿Qué fuerzas ocultas generan este fenómeno en el coloso del sistema solar? Las hipótesis apuntan a colisiones entre partículas cargadas provenientes del espacio profundo y átomos en la atmósfera joviana, cerca de sus polos magnéticos. Sin embargo, la escala descomunal de estas exhibiciones lumínicas sigue desconcertando a los investigadores.

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Un consorcio científico internacional, tras analizar los datos recopilados por el Webb durante las observaciones navideñas de 2023, confirma que la intensidad supera todo lo documentado previamente. “Estamos ante un laboratorio natural de física de plasmas que desafía nuestros modelos”, admitió la Dra. Elena Vásquez, astrofísica del equipo, en entrevista exclusiva.

Este hallazgo se suma al repertorio de descubrimientos del Webb, que meses antes había obtenido imágenes sin precedentes de las auroras de Neptuno. Curiosamente, estas habían sido detectadas de manera tenue por la sonda Voyager 2 hace décadas, pero sin la resolución necesaria para descifrar su naturaleza. ¿Qué otros secretos guardan los planetas exteriores que el ojo infrarrojo del Webb podría desentrañar?

Documentos internos de la NASA a los que este medio tuvo acceso sugieren que los próximos objetivos incluyen estudiar la interacción entre los vientos solares y las magnetosferas planetarias. Las revelaciones podrían reescribir lo que sabemos sobre protección atmosférica en cuerpos celestes más allá de nuestro vecindario cósmico.

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