Un paradigma de opacidad se revela cuando propiedades de reducidas dimensiones, obtenidas de manera progresiva y supuestamente producto del trabajo y dedicación, son la explicación del secretario de gobierno, José Ramiro López Obrador, para la adquisición de trece predios rurales y 694 reses valoradas en varios millones de pesos, detalladas en su declaración de bienes.
Fue el periodista, Audelino Macario, quien divulgó un extracto de la declaración de patrimonio, resaltando la compra de los trece ranchos localizados en Tabasco, con un desembolso en efectivo de 6.9 millones de pesos y la adquisición de 694 cabezas de ganado bovino por un monto de 10.4 millones de pesos. Esta situación genera un contraste evidente, ya que José Ramiro López afirmó no contar con un empleo, negocio o fuente de ingresos durante el año 2023.
Sin impugnar la autenticidad de los archivos, ni esclarecer la procedencia de los cuantiosos fondos, el funcionario del partido Morena manifestó que son los ‘grupos de poder’ en la nación quienes orquestaron una campaña de desprestigio en su contra por ser hermano del ex presidente, Andrés Manuel López Obrador.
