La política migratoria de Trump podría desplomar las remesas en Yucatán

¿Qué pasaría si las remesas dejaran de ser el salvavidas económico de Yucatán? Miguel Martínez Contreras, representante de Poder Migrante Mexicano, plantea un escenario disruptivo: la política migratoria de Donald Trump podría desencadenar una caída histórica del 30% en estos envíos, desafiando el modelo de dependencia que sostiene a municipios como Oxkutzcab y Peto.

Pero aquí surge la pregunta incómoda: ¿y si esta crisis es la oportunidad para reinventar la economía local? Las redadas en EE.UU. no solo amenazan a 20,000 yucatecos indocumentados, sino que exponen una vulnerabilidad sistémica. Imaginen un Yucatán donde la innovación social y el emprendimiento comunitario reemplacen progresivamente la dependencia de divisas externas.

Los datos son contundentes: en 2024 ingresaron 1,500 millones de pesos en remesas. Sin embargo, la posible reducción podría catalizar cambios radicales. ¿Podrían Motul y Tunkás convertirse en laboratorios de economías circulares? La crisis humanitaria proyectada -con pobreza y conflictos sociales- podría transformarse en el detonante para construir resiliencia económica desde lo local.

Mientras algunos ven solo el riesgo, los pensadores disruptivos identificamos patrones ocultos: esta presión migratoria podría acelerar la transición hacia modelos económicos autosustentables, donde el conocimiento de los migrantes retornados se fusione con el capital social yucateco. El verdadero desafío no es evitar la caída de remesas, sino reinventar las reglas del juego económico.